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Introducción: En un mundo llenas de crestas, donde unas casi se sobreponen sobre las otras, la de Cabrés no deja de ser un protagonista de segundo orden.
El cordal nace en el Portarró d’Espot, amplio collado que resulta ser el ecuador o la línea de unión de dos valles sin igual en el Pirineo: Aigües Tortes y Sant Maurici, Parque nacional (no reconocida por la UNESCO por la existencia de instalaciones de saltos de agua para el aprovechamiento eléctrico).
La subida a la primera cumbre es una verdadera “cuesta de vacas”, pero finalizado el sacrificio, empieza esta divertida y desconocida cresta, que, paralelamente, no parece tener grandes pretensiones.
En el recuerdo de su escalada, el tórrido calor del día y la gélida realidad de la noche. Corría el mes de agosto, y un sol de justicia parecía querer requemar la piel de nuestro brazos, ya de por si curtida de tantas horas de sol de tantos otros días de escaladas veraniegas. Al suplicio la recompensa. Como la tarde se prestaba a la calma y a la holgazanería (habíamos decidido vivaquear en las proximidades de los lagos situados bajo la vertiente este del Pico Ratera), aprovechamos que el sol aún estaba alto para disfrutar de un fugaz y gélido baño en las aguas de los estanques. Poco más tarde, con la agradable sensación de haber aliviado el cuerpo de tanta tostadura, empezamos a preparar la cena, y a medida que el astro rey se acercaba a su ocaso, íbamos sacando de la mochila las diferentes prendas de vestir para protegernos de la fresca del atardecer. Como sea que era verano, y por aquello de ir ligeros de equipaje, llevábamos fundas de vivac en vez de sacos de dormir.
Nuestra sorpresa fue mayúscula cuando los grados centígrados empezaron a desplomarse por debajo de lo previsto. A eso de las 12 de la noche empezamos a sospechar que la helada era un hecho, y a las 4 de la madrugada, hartos de tanto tiritar, decidimos abandonar nuestras fundas escarchadas y acartonadas y empezar a caminar como sonámbulos. Para poco servimos al día siguiente, la idea de encadenar una cresta con otra se desvaneció. En nuestra menta un único pensamiento: esperar que el sol nos volviese a tostar.
Cumbre principal: PIC DE CABRÉS, 2.790 metros.
Dificultad: Algo Difícil inferior. Varios pasos de III* y III+. Roca buena. La cresta es poco mantenida y los pasos claves se pueden flanquear, todos ellos, perdiendo entonces carácter el recorrido y rebajándose la dificultad a P.D. inferior. Se recomienda, por tanto, seguir el filo.
Horario: 4 horas y 30 minutos
Primera ascensión: María Antonia Simó de Jolis, J. Aspachs y J. Clapés el 23 de julio de 1960.
Material útil: Cuerda de 55 o 60 metros para ráppel. Friends y tascones pequeños y medianos.
Cartografía útil:* VALL DE BOÍ – PARC NACIONAL D’AIGÜES TORTES I ESTANY DE SANT MAURICI. Editorial Alpina – escala 1:25.000.
* PICA D’ESTATS – ANETO. Mapa excursionista – carte de randonnées núm. 22, co-edición Institut Cartogràfic de Catalunya – Rando éditions (francés). Escala 1:50.000
Punto de partida: ESTANY DE SANT MAURICI. Accesible mediante pago de taxi o caminando desde el aparcamiento situado al inicio de la zona restringida. 1 hora y 10 minutos.
Acceso: Por carretera pasando por el pueblo de ESPOT. Como ya hemos dicho anteriormente, la antigua carretera asfaltada que permite el acceso al mismo lago, ahora tan solo la transitan taxis de pago. Un camino bien marcado evita el asfalto en este tramo.
Aproximación a la cresta: Un camino muy marcado, casi una pista, enlaza el valle de Sant Maurici, al este, con el valle de Sant Nicolau o Aigües Tortes, al oeste, pasando por el PORTARRÓ D’ESPOT. En las bifurcaciones del camino siempre hay un cartel indicativo que nos informa del camino correcto a seguir, por lo cual no hay pérdida posible. El Collado está a 2.423 metros de altura y en él localizamos una pequeña balsa de agua. Desde aquí subir hacia el norte por monótonas pendientes herbosas carentes de complicaciones, hasta llegar a la cúspide del PIC DEL PORTARRÓ. 2.733 mts. Fácil. Punto de inicio de la cresta. Contar 1,30 horas de Sant Maurici al Collado y 40 minutos más para llegar del Collado a la cumbre.
Recorrido: Tan solo abandonar el PIC DEL PORTARRÓ en dirección N.O., la cresta se dibuja afilada, llena de bloques. A pesar de ello, la vertiente S.O. es herbosa permitiendo varios flanqueos, aunque aconsejamos seguir íntegramente el filo. Encontramos entonces varios pasos de III-. El primero bajo un monolito que se debe flanquear por la vertiente N.E. utilizando una roca que obliga a un paso de caballo. El segundo lo encontramos en un destrepe por bloques en el mismo COLL DE CABRÉS, 2.541 mts. Punto menos elevado del cordal.
Al volver a ascender, y siguiendo estrictamente la línea más alta, encontramos un monolito coronado por una roca anaranjada que nos ofrece una distraída trepada: primero un diedro, luego una superación utilizando una fisura para los pies, y tras adentrarse entre grandes bloques, encontramos un breve muro colgado sobre el vacío con buenos agarres de manos para la superación. Conjunto del paso: III+. Más tarde el cordal se corta a pico hasta una brecha, ráppel de 26 – 27 metros. Seguir por bloques fáciles y escalonados (II-) hasta el PIC DE L’ESTANY REDÓ, 2.743 metros. La cadena toma dirección N.E. siendo horizontal y discurriendo por bloques graníticos fáciles. Una brecha carente de complicaciones anuncia el próximo ROQUES DRETES, 2.725 metros. De nuevo gira el cordal en dirección N.O: presentando el tramo más accidentado con tres agujas bien delimitadas a la que llegamos tras un destrepe por placas lisas (II+).
1ª aguja: Un tramo de arista aérea da paso a un breve muro de 2 metros para acceder a un bloque gigante que cuelga sobre el cordal y que se presenta ligeramente inclinado hacia la derecha. Traspasar horizontalmente por su lomo mediante técnica de adherencia. Paso espectacular. (III*), destrepar hasta la próxima brecha (II+).
2ª aguja: Tomar la vertiente derecha, escalar una lastra inclinada (II+) y proseguir por bloques fáciles.
3ª aguja: Presenta una verdadera lámina de roca que corta el cielo. Evitarla por la izquierda, siendo el traspaso de la brecha un paso más espectacular que difícil por rocas cortantes (II+).
Al volver al cordal se descubre el último tramo, carente de dificultades, que poco a poco nos conduce al cono somital fácil del PIC CABRÉS, 2.790 metros. A.D.-.
Descenso: Por la Coma de Cabrés. Situada al sur de la cumbre, resulta el descenso idóneo si deseamos volver al LLAC DE SANT MAURICI. Desde el collado contiguo al PIC DE CABRÉS, situado en el punto de enlace con la cresta del mismo nombre, encontramos una canal pedregosa e inestable que conduce al caos de piedras de la COMA DE CABRÉS. Descendiendo por el laberinto de bloques llegamos a L’ESTANY DE MUNYIDERA, próximo a la pista que conduce al ESTANY DE SANT MAURICI. Contar algo más de 2 horas para el descenso.
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Autor PAKO CRESTAS. No se permite la reproducción total o parcial del presente reportaje sin el consentimiento expreso y escrito del autor.
- PIC DEL PORTARRO (Atrás – ligeramente oculto)
- COLL DE CABRÉS
- Breve muro colgado sobre el vacio (III+)
- PIC DE L’ESTANYÓ RODO
- Tramo de las 3 agujas (IIIº)
- PIC CABRÉS, 2.790 m.
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