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En tierras kurdas destaca especialmente la celebración de las antorchas de Nowruz en la ciudad de Akre. Nosotros seremos testigos de esta milenaria tradición este mismo 2022, aprovechando el viaje que hemos organizado para ascender al Cheekha Dar 3611 metros, la cumbre más alta del antiguo Irak: https://www.catalonia-trekking.com/viajes-mon-petit/

Nowruz, Noruz o Norouz, es el año nuevo del calendario persa. Se trata de una de las celebraciones más antiguas de la humanidad. Se celebra en Irán y Kurdistán y en otros territorios que recibieron la influencia de la cultura persa, como Azerbaiyán, Afganistán, Uzbekistán, Tayikistán, Turkmenistán, Pakistán, en algunas regiones de India, en Turquía y en países de Asia Central. La festividad marca el primer día de la primavera y el principio del año, en los días 20, el 21 o el 22 de marzo.

La palabra ‘Nowruz’ proviene de la avéstica ‘nava’, que significa ‘nuevo’ y se le suma ‘razanh’, que es el día, la luz, de allí su significado de ‘nuevo día’. En persa moderno, mantiene el mismo significado: no=nuevo + rooz=día.
El Nowruz o “Nuevo Día” es básicamente una fiesta de renovación. Es el momento de barrer el polvo del año anterior para recibir con luz y limpieza el nuevo ciclo. Las celebraciones marcan el fin de la oscuridad invernal y la llegada de la primavera. Es por eso que limpiar los hogares es una tarea clave en estos días. Las alfombras se sacuden y se limpia hasta lograr el brillo en cada rincón.

La mayoría de las ceremonias de Nowruz tienen sus raíces en la religión zoroastriana, surgida en Irán hace unos 3.000 años. Una religión anterior al cristianismo y al islam, cuyas ceremonias se centran en la comunidad, la familia y el respeto por la tradición.
La fe del zoroastrismo se basa en la lucha entre Dios, las fuerzas de la bondad y la luz (representada por el Espíritu Santo, Spenta Manyu) y Ahriman, que preside las fuerzas de las tinieblas y el mal. El enfrentamiento termina con el triunfo de la luz. Es por eso que la llegada del año nuevo persa representa esa batalla. Es el final de la oscuridad invernal y el renacimiento de la Luz y la fertilidad. Dos elementos son básicos en estos días de festividad. El fuego y la limpieza del hogar y otro elemento común con otras festividades: la comida que reúne a toda la familia similar a la Navidad de Occidente o al Año Nuevo Chino.

Para el Nowruz se prepara el Haft-Sin, una mesa con un mantel sobre la cual se sirven siete (el número sagrado) elementos que se inician con la letra S del alfabeto persa. Cada elemento señala un año próspero y abundante por delante: Sabzé (trigo o lentejas), que representa el renacer; Sib (manzana), símbolo del deseo y la belleza; Sir (ajo), como representante de la salud; Somag (zumaque) una especia; Serké (vinagre), como símbolo de la madurez y la paciencia ante las adversidades; Sombol (jacinto), que representa la llegada de la primavera y las Sekke (monedas de oro), tradicional símbolo de riqueza.
